viernes, 29 de abril de 2011

BIBLIOGRAFÍA

- Libro de texto de Ciencias sociales, historia de Cuarto de la E.S.O.
- http://club.telepolis.com/pastranec/temascomp/Tema64.html
- http://www.epdlp.com/pintor.php?id=251
- http://vereda.saber.ula.ve/historia_arte/introduccion/romanticismo.htm
- http://www.arteespana.com/esculturasigloxix.htm
- Imágenes de GOOGLE

LA PINTURA ROMÁNTICA ALEMANA.


La pintura romantica sucede a la pintura neoclásica de finales del XVIII, con unos nuevos gustos desarrollados por todas las facetas artísticas del Romanticismo como la literatura, la filosofía y la arquitectura. Está hermanada con los movimientos sociales y políticos, que ganaron cuerpo con laRevolución francesa.
El término romántico, surgido en Inglaterra en el siglo XVII para referirse a la novela, fue adaptado a principios del siglo XIX a las artes plásticas, en contraposición al neoclasicismo imperante. Elromanticismo en la pintura se extiende desde 1770 hasta 1870, prácticamente cien años, distinguiéndose tres periodos:
  1. 1770-1820 o prerromanticismo
  2. El apogeo del romanticismo pictórico se da, aproximadamente, entre 1820 (hay fuentes que señalan 1815) y 1850 (o, por adoptar una fecha simbólica, 1848).
  3. 1850-1870 o tradición post-romántica.
Cada uno de estos períodos posee sus particularidades en cuanto lugares en que se desarrolló o artistas que lo adoptaron.



La Muerte de Sardanápalo, de Delacroix, h. 1827, Museo del Louvre. Cuadro que ejemplifica el gusto romántico por lo exótico, la unión de erotismo y muerte y la influencia de autores barrocos como Rubens; logra una escena tumultuosa en la que domina el color sobre el dibujo.

miércoles, 20 de abril de 2011

ARQUITECTURA

La arquitectura del siglo XIX es una arquitectura urbana. Durante la época del segundo Imperio aparecen en Francia nuevas tendencias arquitectónicas, donde el Romanticismo intenta volver a las formas clásicas y a la estética medieval con los estilos mudéjar e isabelino,recuperando con ellos todas sus características . Nacen los historicismos, que rememoran lo antiguo imitándolo.
En España se encuentran el estilo mudéjar y el estilo isabelino. El estilo mudéjar utiliza materiales como el ladrillo y elementos constructivos de los cristianos y los musulmanes. Las estructuras arquitectónicas y los materiales son modestos, pero se logra un gran realce mediante el trabajo ornamental del ladrillo, yeso y madera.

El estilo Isabelino es el que se impuso durante el reinado de Isabel II de España. Este estilo tiende a recuperar los rasgos distintivos del estilo Imperio. Se vuelven a emplear materiales tradicionales como la caoba, pero el más destacado es el palo santo por ser una madera dura y con una veta interesante.
 Arquitectos españoles importantes son:
- Matías Laviña: restauración de la catedral de León.
- Aníbal Álvarez Bouquel, Narciso Pascual y Colomer (1808-1870): Congreso de los Diputados, palacio del marqués de Salamanca, hoy Banco Hipotecario, que tienden a lo isabelino.
-Emilio Rodríguez Ayuso, (1845-1891) que construye múltiples plazas de toros.
Con la Restauración, y el triunfo del absolutismo monárquico, aparece en España una arquitectura triunfalista y monumental de carácter ecléctico, que utiliza el hierro, cuyos máximos representantes son:
- Agustín Ortiz de Villajos (1829-1902): hospital del Buen Suceso, teatros de La Comedia y María Guerrero.
- Fernando Arbós y Termanti: basílica de la Virgen de Atocha.
- Luis de Aladrén: fachada de la Diputación de Vizcaya.
- Joaquín Rucoba: Ayuntamiento de Bilbao.
 

ESCULTURA

El escultor romántico estaba tan entregado a la figura humana como el neoclásico, aunque no se limitó a trabajar el mármol; sus retratos se regían también por un equilibrio apropiado entre lo real y lo ideal, y se inspiraban también en la Antigüedad.  Sin embargo, la escultura romántica se distingue de la neoclásica por los personajes, que expresan emociones violentas, y un estilo caracterizado por el movimiento intenso y exagerado, ejecutando a menudo con una técnica de boceto. La Marsellesa de FranÇois Rudé sobre el arco de Triunfo de París es un buen ejemplo de la escultura romántica del período, obra de uno de sus principales artistas.



La escultura, basándose en formas griegas romanas, en fuentes modernas y en la composición barroca, carga de intensidad psicológica y física un acontecimiento contemporáneo.

Las figuras de Rudé recuerdan a las obras maestras helenísticas, como el Laocoonte que sirvió de inspiración a Miguel Ángel. La extraordinaria animación de las figuras y la densidad de la composición lograda mediante la exageración del gesto y el detalle anatómico tienen mucho en común con el ultrarrealismo de la escultura helenística. La representación de detalles ultrarrealistas puede pretender aspirar en cierto modo al naturalismo.

 

En La Marsellesa, la influencia del siglo XVIII es evidente en las actitudes más relajadas de las figuras y en su carácter juguetón expresado en el gesto y en las expresiones faciales. Las proporciones de la figura se aproximan a las del natural, y el modelado de sus superficies se acerca a la suavidad de la carne humana.

 

 

Escultura del siglo XIX en España

El corto periodo romántico en escultura responde a encargos oficiales para embellecer edificios o erigir monumentos conmemorativos. A diferencia de lo que sucede en pintura, se caracteriza por la falta de carácter y la desorientación. Es una época de transición, que alterna elementos clasicistas con otros criterios que desembocarán en un nuevo realismo.

Ponciano Ponzano

Sus mejores obras son los relieves Hércules y Diomenes y La Virgen con su hijo en los brazos.
Su San Jerónimo aparece reclinado sobre una roca y alza el rostro al escuchar la trompeta del juicio, mientras a su lado aparece un león que dormita. El modelado es perfecto y la tensión interna que hace vibrar la figura sin agitarse, contrasta con la calma del animal.


José Gragera (1818-1897)Es la representación más clara del romanticismo en nuestro país. Su monumento a Juan Álvarez Mendizábal, inicia un nuevo estilo de estatua que abandona las togas y las cabezas a la romana, para cuidar del parecido con el representado. Lo dota de ropa moderna, no estilizada y tratada con sobriedad.
Su otra gran obra es el Don Simón de Rojas Clemente.



CASPAR DAVID FRIEDRICH


    Pintor romántico alemán del siglo XIX cuyos impresionantes paisajes y marinas no son sólo fruto de una observación de la naturaleza, sino que tienen también carácter alegórico. Nació en septiembre de 1774 en Alemania y estudió en la Academia de Copenhague. En 1798 se estableció en Dresde, donde entró a formar parte de un círculo literario y artístico de los ideales del movimiento romántico.
 Sus primeros dibujos (perfilados con precisión a lápiz o sepia) se representan motivos como: playas de rocas, llanuras planas y desnudas, cadenas montañosas infinitas y árboles que se elevan hacia el cielo.
 Más adelante su obra comienza a reflejar cada vez más la respuesta emocional del artista frente a los escenarios naturales.
Comenzó a pintar al óleo en 1807, uno de sus primeros lienzos, La cruz de las montañas
 Representa su estilo de madurez. Esta obra, que rompe totalmente con la pintura religiosa tradicional, es paisaje casi en su totalidad, la figura de Cristo crucificado, vista desde atrás y recortada contra la puesta de sol en la montaña, se halla casi perdida en el escenario natural.
 Según los escritos del propio Friedrich, todos los elementos de la composición tienen carácter simbólico:
-Las montañas son una alegoría de la fe.
-Los rayos del sol del atardecer simbolizan el final del mundo precristiano.
-Los abetos representan la esperanza.
-Los colores fríos, ácidos.
-La iluminación clara y los contornos contrastados potencian los sentimientos de melancolía, aislamiento e impotencia humana frente a la fuerza inquietante de la naturaleza que se expresa en su obra.
Otras obras:
Abadía del Robledal (1809-1810)
Este paisaje se encuentra iluminado por la luz del crepúsculo, la cual le da una profunda espiritualidad. En medio del paisaje aparece la ruina gótica de una abadía. La Naturaleza se encuentra jerarquizada en función de mostrar este aspecto religioso.
La presencia de una arquitectura gótica nos muestra la importancia de este estilo en época ya muy temprana.
 El Mar de Hielo 
Es una obra tensa y dramática que, sin embargo, no refleja ningún tipo explícito de violencia exterior. Se representa el naufragio de un barco aprisionado entre unos inmensos bloques de hielo y parece ser que fue inspirado por un hecho real acontecido en el invierno de 1820 en el río Elba, en las inmediaciones de Dresde.



 El cementerio de Cloister nevado (1817)- Óleo sobre lienzo - 121x170cm - Desaparecido.Copia en el Nacional Gallery. Berlín.




El arbol con cuervos (1822)- Óleo sobre lienzo - 59x74cm - Museo de Louvre. París











PINTURA

La mayoría de los pintores románticos reflejan en sus obras valores de la época. Principales rasgos:           
  -Movimiento. Esta característica supone una ruptura con el estilo neoclasico, solemne e inmóvil.
  -Color y luz. Se emplean colores brillantes, aplicados con pinceladas sueltas y los cuadros se llenan de luz.
  -Paisaje. La naturaleza es la protagonista de la mayoría de los cuadros. Se presentan paisajes violentos y llenos de contrastes.
PINTORES ROMÁNTICOS MÁS DESTACADOS:

Théodore Géricault, " La Balsa de la Medusa" se exsalta el movimiento de personas y fuerzas de la naturaleza.
 

Eugéne Delacroix, influido por Rubens, de quien tomó colores luminosos y composiciones serpenteantes.
Caspar David Fredrich y al inglés Joseph W. Turner, geniales paisajistas.

En España destacan las pinturas costumbristas:
Valeriano Becquer
Pérez Villaamil  
Federico Madrazo, pintor de retratos (La Condesa de Vilches) y cuadros históricos.
Mariano Fortuny con obras munuciosas y coloristas.                            
 











PINTURA DE GOYA
La pintura romántica apela al subjetivismo y la originalidad. Se inspira en escenas violentas como en La carga de los Mamelucos de Goya, utiliza el dramatismo, para remover el sentimiento del público.

En cuanto la expresión, utiliza fuertes contrastes de luz y sombra (claroscuro). El colorido es característico del romanticismo, pues en el dibujo asume un papel secundario. La pincelada se hizo visible, rápida y violenta. El empaste es en general grumoso y espeso, de manera que la pintura adquirió una naturaleza táctil que reforzaba su carácter de creación impulsiva y espontánea.
En cierto sentido, al hablar del romanticismo se puede hablar de un neo-barroco, por el movimiento, la tensión, el empuje, los contrastes y los colores de estos cuadros. Son, en general, pintores barrocos los que influyen a los pintores románticos: la huella de Caravaggio es evidente en Géricault, mientras que Rubens influye en Gros y en Delacroix. Ello no elimina que en casos concretos otros sean los pintores que influyeron.
Así, el tema de la naturaleza hizo que los paisajes se convirtieran en un género mayor, cuando hasta entonces era considerado menor. No se trataba de descripciones topográficas, sino de expresar emociones humanas a través del paisaje.. También alcanzó cierto desarrollo la pintura animalista, esto es, la que representaba animales, tanto salvajes como domésticos, si bien con tendencia a mostrarlos fieros, por lo que se pintaron numerosos cuadros reflejando actividades como la caza, y animales como el león o el caballo, siendo este último el animal fetiche de Géricault. Otro género que cobró importancia fue la pintura costumbrista, que reflejaba los tipos y personajes populares.
Las técnicas usadas variaron. Predominó la pintura al óleo sobre lienzo, de variados tamaños, inclinándose los franceses, en general por los de grandes dimensiones. Pero también se utilizó la acuarela, técnica preferida por muchos pintores ingleses, y que era especialmente útil.

jueves, 14 de abril de 2011

ROMANTICISMO

Es un movimiento artístico y cultural que se extendió por Europa en las primeras décadas del siglo XIX, además también fue una amplia corriente intelectual, con claras connotaciones políticas.

El romanticismo significó una nueva estética y un nuevo sentimiento que tenia como principales valores el amor a la libertad, la exaltación del individualismo y la defensa de los sentimientos. Esto se tradujo en una profunda insatisfacción por el presente, en el placer de disfrutar de la naturaleza o en el gusto por el erotismo y las cosas conocidas.
Los artistas románticos rechazaban todas las formas del arte clásico del siglo XVIII y reclamaban una total libertad artística y proclamaron el nacionalismo.
A pesar de que el movimiento romantico reflejó una determinada sensibilidad y visión del mundo, presentó una doble vertiente. Mientras el primer romanticismo tuvo un carácter conservador, el segundo era liberal y hasta revolucionario, exaltaba la libertad y el progreso humano.
Muchos artistas románticos, escritores, pintores y músicos, se implicaron en luchas liberales y nacionales y ayudaron con sus obras a defender y extender esas ideas.